Él no quería otro bebé 🚫
por Leigh Harper
traducido por María Casanova Sánchez
Toda mi vida soñé con tener al menos dos hijos. Nuestro primer bebé, empezó a dormir toda la noche del tirón, apenas tenía 7 semanas (aleluya) y además, sonreía constantemente.
Así es que imagínate el shock que experimenté cuando mi marido, John, que adoraba a nuestra bebé tanto como yo, decidió que no quería tener más niños.
Le pedí a Dios que, por favor, hiciera que John cambiara de parecer; pero conforme pasaba el tiempo, cada vez me sentía más confusa y amargada. ¿Cómo podía ser que el Señor me diera este anhelo, pero, sin embargo, mi marido no lo compartiera?
Inconscientemente, culpé a John por alejarme de mi sueño. Me sentía como si estuviéramos en equipos diferentes, y además el mío era el equipo perdedor.
Mientras comentaba el tema con mi consejero, amigos y mentores, me lamentaba de que el sueño se me estuviera escapando de las manos
Finalmente, un amigo me retó muy suavemente cuando me preguntó, "¿y si es Dios el que quiere que cambies de opinión y no John?"
Guau. Esa era una idea que ni me había planteado y que, además, no me gustaba nada. Pero conforme le daba vueltas al tema, me dí cuenta de lo egoísta que había sido aferrándome a mis propios deseos. Estaba tan firme en mi decisión que me había cegado a la posibilidad de que mi sueño no fuera el sueño que el Señor tenía para mí.
Decidí cambiar mi oración.
En vez de pedirle a Dios que cambiara a John, le pedí a Dios que nos uniera. Le pedí a Dios que nos diera los mismos deseos y la misma visión para nuestra familia.
Meses después, nuestra iglesia celebró una sesión informativa sobre acogida de niños. John sugirió que fuéramos. Yo estaba alucinada y a la vez cuidadosamente optimista.
Doy un paso adelante: Ahora tenemos una niña de 12 años que adoptamos a través de la acogida. Nuestra hija biológica tiene 5 años. Nuestra familia no tiene nada que ver con lo que un día pensé que sería, pero no puedo estar más agradecida. Su plan ha sido mucho mejor de lo que pude imaginar para las vidas de nosotros cuatro.
FE + AMOR + VIDA
LO BUENO: "Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos ni vuestros caminos mis caminos», dice Jehová. «Como son más altos los cielos que la tierra, así son mis caminos más altos que vuestros caminos y mis pensamientos, más que vuestros pensamientos ."
PUNTOS DE ACCIÓN: ¿Hay algún tema no resuelto en tu matrimonio en el que todavía no estás de acuerdo?. Pídele a Dios que de unidad a tu matrimonio, y que los deseos de ambos se alineen al plan de Dios.
IDED I Do Every Day 365 Day Devotional
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Este contenido traducido es una modificación de la versión original en inglés.